Como copywriter siento una especial fascinación por el poder infinito de las palabras. Y justo hoy cayeron en mis manos, casi simultáneamente, la novela más popular en la historia de Irán y una entrevista con su autora en “Babelia”, el suplemento cultural del periódico español “El País”.
En mi caso, a veces el famoso bloqueo del escritor se convierte en obstrucción total. Cero ideas, mente en blanco, nada de nada; y luego ¡la ofuscación! Pero hay un método que nunca me ha fallado (por lo menos hasta ahora…); es sencillo y consiste únicamente en responder 5 preguntas.
La sencillez y claridad de esta idea me gustó: “Todos –marcas y personas- deberíamos tener un hogar en internet”. Así lo dijo el experto español en reputación online, Óscar del Santo, en el seminario-taller que impartió en El Salvador a mediados de este caluroso mes de julio. Y luego, revisando mis apuntes, quise dedicar este texto a las populares “keywords” o “palabras clave”, imprescindibles tanto para construir ese hogar como para hacerlo visible y trascendente entre todo el universo de sitios web y redes sociales que compiten por nuestra atención.
En este post quiero compartir información especialmente dirigida a quienes les resulta complicado trabajar en sus oficinas, en el horario tradicional de 8.00 a.m. a 5:00 p.m., para crear los mensajes y contenidos diferenciales, originales y de valor para su marca.
“11 Things I Wish I Knew When I Started My Business” fue el primer post que leí en Medium. Las pericias que ahí narra Stephanie St.Claire me hicieron reír e identificarme con ella; y fue así como descubrí esta plataforma que invita a cualquiera, a todos, a contar historias.
Quienes han estado siguiendo con vehemencia o incluso de reojo la Copa Mundial de Fútbol 2014 saben que estos apellidos pertenecen a los jugadores de Costa Rica que, con su esfuerzo y coraje han hecho soñar a los centroamericanos, han impresionado al resto del mundo; y en mi caso particular me han hecho reflexionar sobre la marca país y el re-branding.
No. No se dejen llevar por el título. En esta ocasión no hablaré del marketing de productos para bebés (¡todo un universo por explorar!); ni sobre cómo las figuras públicas aprovechan el nacimiento de sus hijos para mejorar, reforzar o relanzar su marca personal. Hoy sólo quiero excusarme por adelantado pues estaré ausente de este espacio durante varias semanas para recibir ¡¡¡¡¡a mi primer hijo!!!!!
Me refiero a la “F” de friends, fans y followers que las marcas luchan por conquistar desde Twitter, Facebook, Pinterest y otras a un ritmo frenético. Y no es para menos: cada segundo cuenta en ese entorno donde la última palabra la tienen consumidores exigentes, hiperconectados, escépticos, escasos de tiempo, atiborrados de información y empoderados.
Hace poco caí en la cuenta que, muy probablemente, el proyecto de la Trastienda comenzó a gestarse casi 10 años atrás o más, coincidiendo con el despertar de mi gusto por los libros que hablan sobre un hecho aparentemente básico: ¿cómo escribir?
Hoy en día crear y contar historias es parte del trabajo de construcción de una marca, después de todo estamos en el apogeo de la era del branded content. Y aunque hay una graaaaaaaan diferencia entre esta tendencia del marketing y la producción literaria, ésta última es una fuente inagotable de información e iluminación para la primera.